Celta de Vigo 66
Univ. de León 70
Polideportivo de Balaidos 50 espectadores
Último viaje de la temporada para el universitario leonés, que se desplazaba a Vigo para jugar el partido adelantado de la jornada 26 frente al Celta de Vigo.
Partido disputado en el Polideportivo de Balaidos, cancha situada bajo las gradas del estadio del campo de futbol, y que no se encontraba en sus mejores condiciones para la disputa del encuentro, y tal vez fue causante, en gran parte, de las dos lesiones producidas en el transcurso del mismo. Así, cuando aún no se habían disputado ni veinte segundos de juego, la base visitante, Sandra, caía lesionada con un fuerte esguince de tobillo. En el segundo cuarto sería la local Prado la que se lesionaría en al rodilla.
Esperamos y deseamos que ambas se recuperen cuanto antes de las lesiones.
Parte médico aparte, el choque fue vibrante y emocionante hasta los segundos finales, con un Celta que en el primer cuarto salió mucho más centrado que las leonesas y que pusieron la distancia en el marcador, con ventajas cercanas a los diez puntos, que en rachas de anotación de ambos conjuntos conseguían distanciarse en el marcador.
El segundo cuarto fue un periodo "cuasi" perfecto para las visitantes, que supieron recuperarse, recortar la distancia conseguida por las gallegas y mandar en el marcador, en un intercambio de liderazgo entre ambos conjuntos que se mantendría hasta el final. Veinte nueve puntos anotaron las leonesas en ese tiempo para irse comandando el marcador en el descanso, tras hacer un gran trabajo defensivo, con unas rotaciones que daban minutos a todas las jugadoras de la ULE, y planteando una zona que provocaba problemas de circulanción en el equipo gallego, con un poderoso juego interior.
El segundo tiempo se mantuvo la tónica de igualdad entre ambos conjuntos, con múltiples alternancias en el marcador, sin que ninguno de los dos equipos consiguiera abrir una brecha que diera tranquilidad en el electrónico.
Igualados se llegó al último cuarto, donde a falta de tres minutos, las locales dominaban por cinco puntos, pero la gran actuación de las bases leonesas, Alba y María, conseguían neutralizar en dos ataques consecutivos la ventaja gallega, y ponerse por delante, con una sólida defensa que a las celtiñas costaba atacar, provocando cierto nerviosismo en el ataque local. Nerviosismo que las universitarias supieron ver perfectamente para atacar concienzudamente a las propietarias de la cancha, entrando en el último minuto con una ventaja de seis puntos, que sin dar tranquilidad, si permitían jugar los ataques más largos para que los segundos se fueran consumiendo en el electrónico. Un triple local devolvía la emoción a falta de 10 segundos, pero María Peña, desde la línea de tiros libres se encargaba de sentenciar el encuentro.
Si en el encuentro de ida, las leonesas realizaron, probablemente, su peor partido de la temporada, este miércoles en Vigo se resarcieron, tal vez, como díria el vigués Julián Hernández, de Siniestro Total, porque "El criminal vuelve al lugar del crimen, sin nostalgia y sin arrepentimiento, para celebrar una fiesta bestia sin concesiones". Y un gran partido de baloncesto de alto nivel ofrecieron ambas escuadras.
Univ. de León 70
Polideportivo de Balaidos 50 espectadores
Último viaje de la temporada para el universitario leonés, que se desplazaba a Vigo para jugar el partido adelantado de la jornada 26 frente al Celta de Vigo.
Partido disputado en el Polideportivo de Balaidos, cancha situada bajo las gradas del estadio del campo de futbol, y que no se encontraba en sus mejores condiciones para la disputa del encuentro, y tal vez fue causante, en gran parte, de las dos lesiones producidas en el transcurso del mismo. Así, cuando aún no se habían disputado ni veinte segundos de juego, la base visitante, Sandra, caía lesionada con un fuerte esguince de tobillo. En el segundo cuarto sería la local Prado la que se lesionaría en al rodilla.
Esperamos y deseamos que ambas se recuperen cuanto antes de las lesiones.
Parte médico aparte, el choque fue vibrante y emocionante hasta los segundos finales, con un Celta que en el primer cuarto salió mucho más centrado que las leonesas y que pusieron la distancia en el marcador, con ventajas cercanas a los diez puntos, que en rachas de anotación de ambos conjuntos conseguían distanciarse en el marcador.
El segundo cuarto fue un periodo "cuasi" perfecto para las visitantes, que supieron recuperarse, recortar la distancia conseguida por las gallegas y mandar en el marcador, en un intercambio de liderazgo entre ambos conjuntos que se mantendría hasta el final. Veinte nueve puntos anotaron las leonesas en ese tiempo para irse comandando el marcador en el descanso, tras hacer un gran trabajo defensivo, con unas rotaciones que daban minutos a todas las jugadoras de la ULE, y planteando una zona que provocaba problemas de circulanción en el equipo gallego, con un poderoso juego interior.
El segundo tiempo se mantuvo la tónica de igualdad entre ambos conjuntos, con múltiples alternancias en el marcador, sin que ninguno de los dos equipos consiguiera abrir una brecha que diera tranquilidad en el electrónico.
Igualados se llegó al último cuarto, donde a falta de tres minutos, las locales dominaban por cinco puntos, pero la gran actuación de las bases leonesas, Alba y María, conseguían neutralizar en dos ataques consecutivos la ventaja gallega, y ponerse por delante, con una sólida defensa que a las celtiñas costaba atacar, provocando cierto nerviosismo en el ataque local. Nerviosismo que las universitarias supieron ver perfectamente para atacar concienzudamente a las propietarias de la cancha, entrando en el último minuto con una ventaja de seis puntos, que sin dar tranquilidad, si permitían jugar los ataques más largos para que los segundos se fueran consumiendo en el electrónico. Un triple local devolvía la emoción a falta de 10 segundos, pero María Peña, desde la línea de tiros libres se encargaba de sentenciar el encuentro.
Si en el encuentro de ida, las leonesas realizaron, probablemente, su peor partido de la temporada, este miércoles en Vigo se resarcieron, tal vez, como díria el vigués Julián Hernández, de Siniestro Total, porque "El criminal vuelve al lugar del crimen, sin nostalgia y sin arrepentimiento, para celebrar una fiesta bestia sin concesiones". Y un gran partido de baloncesto de alto nivel ofrecieron ambas escuadras.
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